miércoles, 9 de abril de 2008

prisa

A gran velocidad, sorteando escarpadas laderas, viento helado arranca lágrimas de mis ojos, aunque ellos se protejan entre cerrados.

El temor que ha tomado casi todo mi cuerpo, deja un pequeño espacio en mí, ese espacio gobierna con lucidez, me permite comandar...

Aferrado al brona, siento la velocidad y el vértigo, en cada giro, ascensos violentos, descensos, caída libre más y más velocidad…

Con agilidad esquivando superficies más y más rápido… mis oídos duelen

Es de sabios saber escapar cuando es necesario….

Hasta el guerrero más temerario lo sabe…

Montado en un brona, me pierdo en la lejanía

3 comentarios:

charlotte dijo...

"Caída libre… esquivando superficies… me pierdo en la lejanía"... es solo un transe, la calma está, en algún lugar...

Anónimo dijo...

saber escapar de un peso atmosferico cada vez más denso...de un una noche tornado...de un tsunami de vino...
escaparse de otros...
escapar de uno mismo... y agrietar el camino de tanto correr...
dame letra...

Federico dijo...

Es curioso el deambular de nuestro popozzy, oleajes y nubes... humedad, es subir a un árbol o esconderse en el juego ingénuo de taparse los ojos... aca o allá, popozzy vive, ineludible su gran pulmón respira nuestros alientos pérfidos, él ahí... salta los cordones, se escapa en la neblina... y se pierde para volver, satisfecho, lleno y abrazarlo es una de las formas de adorar esta vida, de darle las gracias, por la luz, por el sabor de la cereza.